Cuaderno de sentimientos diabólicos
varios, propios y ajenos,
en este constante pedalear por la vida...



6 feb 2014

Solucionario


Se me ha ocurrido que quizás mi destino esté jorobándome la espalda al decirme que vivo para resolver problemas. Mi oficio consiste en resolver problemas: no soy el payaso quejándose de que se rían de él. No. Me explico: si bien la vida es un constante resolver, caminar, resolver sobre la marcha, caminar para resolver, resolver sentado... dar solución... pareciera que ésa es la imagen, el tatuaje en la frente, la "vibra" que estoy expresando... Y se me acercan mujeres que confunden el "amor" (vaya cosa más disparatada) con el "resuélveme la vida", "cúrame"... "absuélveme"... 

No sin antes decir que he perdido el decoro en esta entrada, que no me importa y que no deseo ceñirme a él, escribo mi queja: a ésas mujeres no las quiero. Ellas caminan delante de mí y sólo regresan para "pedir y pedir"... o van detrás de mí y me hacen cargar con la responsabilidad del "sentirse bien", cuando sólo a ellas les corresponde. Quiero ser pareja, amigo, novio, esposo, amante... pero no padre. Padre se es sólo para los hijos. 

Comprendo bien que resolver problemas es parte de todo... no es que no quiera hacerlo, ése no es el punto. El punto es que quiero alguien que camine a mi lado, conmigo, junto a mí... que desee construir conmigo, para ambos, no valerse de mí para erigir con mis fuerzas las ruinas de su espíritu.

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